miércoles, 15 de diciembre de 2010

La música en los rituales de la literatura prehispánica.

Después de andar estos meses sumergido en el mundo de la literatura prehispánica y de intentar rescatar sus grandes hallazgos, detecte que en cada cultura existía un ingrediente sonoro semejante en sus intentos de alcanzar contacto con lo sobrenatural.

Los instrumentos musicales, con el objetivo de resaltar sus rituales y de darle importancia al arte mágico de crear sonidos, se convirtieron en la principal fuente lírica que relataba las provocaciones de la vida, y al mismo tiempo narraba las diferentes formas de existencia y estilos de pensamiento, por eso los prehispánicos lograron trascender el espacio y el tiempo, este ensayo intenta realizar una comparación entre las 2 principales culturas prehispánicas.

Empezare analizando los textos mayas, tomare un ejemplo del Chilam Balam en donde se muestra el ambiente de ritual.


El día se anunció.
Un olor suavísimo y trascendente,
Un aroma a cosa perpetua, nos envolvió.
Sonaron los pitos, las sonajas;
Del parche del atabal salían volutas de sonido a tocar al sol.
Flautistas, cantores, bailarines, pintores,
Todos, nos fuimos, A cambiar de casa al tiempo.
Chilam Balam


Para los mayas la religión era un gran fiesta mística. El contacto con lo sobrenatural era el eje del rito. Los mayas creían que era necesario alimentar a los dioses con sangre humana, gran parte del ritual incluía restos de calaveras, estatuas que sostenían platos para los corazones de los sacrificados, acompañados de música, danza y también quema de plantas sagradas, todo esto como una forma de agradecimiento a la vida y al honor de sus antecesores.

¿Cual es el significado de el verbo ofrendar?, ¿Que tienen que ver los insípidos sacrificios del diezmo contemporáneo comparado con la fe de los antiguos mayas, los cuales en realidad se esforzaban por darlo todo?

Del mismo modo podríamos compararlos con los actuales musulmanes que aun creen que dando su vida van agradar y de asumir su sacrificio como un compromiso con su fe y así creer trascender mas allá de la vida. Es muy complejo confrontar los sentidos antiguos de la ofrenda, con algunos visiones postmodernos que profesan que por dar la vida están entregando su corazón a su divinidad.

Me gustaría traer en este momento a colación una semejanza de el final del CHILAM BALAMAN, donde se relata la ironía del ofrendar el oro a los Dioses.

El Señor de la Flauta Negra empezó a tocar,
-“Más oro, más vasijas, más todo!
Todo lo nuestro es poco para salvar a Chichén Itzá!”
Tutul-Xiú los miraba.

Me da cierta intriga pensar en las diferencias abismales entre la cosmovisión y el sentido de la ofrenda y el sacrificio Maya y la actual pseudoconcreción de aquel acto personal de arrodillarse frente a una cruz o un altar de trazos y volúmenes zoomorfos buscando evocar y provocar análogamente a los espíritus ancestrales, sea el que sea y donde sea.

Este verso anuncia lo insípido que puede resultar para los Dioses nuestros sacrificios, ya que son simplemente por decirlo así de alguna manera grotesca puros “pajazos mentales”.

–Pobres sacerdotes míos, pensaba,
Pobres Brujos del Agua.


Antes que se me olvide quisiera mencionar el día que me encontré con la historia de el Memorial sololá , para ambientar el anterior comentario, voy a escribir que era una tarde fría y extraña, de esas donde todo existe mas allá de las palabras, y sin querer queriendo me encontré un párrafo que me hablaba de la historia de los primeros pobladores de Yucatán, de aquellos abuelos y antepasados del pueblo maya los cuales narraban sus aleaciones genéticas.

Hay que reconoce que para ellos era muy importante ofrecer todo cuanto tenían, y además aprender de ese arte de convivir con sus desconocidos hermanos de territorio.

Primero pagaron el tributo las siete tribus y en seguida pagaron el tributo los guerreros. Pero éste se componía únicamente de piedras preciosas [jade], metal, guirnaldas cosidas con plumas verdes y azules y pinturas y esculturas.
Ofrendaban flautas, canciones, rituales, calendarios astronómicos, pataxte y cacao. Sólo estas riquezas fueron a tributar los guerreros a Tulán durante la noche. Sólo flechas y escudos, solo escudos de madera eran las riquezas que fueron a dar en tributo cuando llegaron a Tulán.
Memorial sololá

En este caso es preciso distinguir las dos actitudes de las diferencias entre el pueblo estático, conservador y sedentario que nunca ambiciono fuera de sus limites y por otro lado el pueblo de guerreros que se esforzó por ver mas allá del horizonte y de ofrendar sus nuevos hallazgos y conquistas .

Para ilustrar otro ejemplo de los textos mayas voy a enunciar algunos fragmentos del Popol Vuh que es otra historia donde se expresa con urgencia la necesidad de los dioses por crear seres que los reconozcan y los invoquen e idolatren.

En seguida se pusieron a tocar la flauta, tocando la canción de Hunahpú-Qoy. Luego cantaron, tocaron la flauta y el tambor, tomando sus flautas y su tambor. Después sentaron junto a ellos a su abuela y siguieron tocando y llamando con la música y el canto, entonando la canción que se llama Hunahpú-Qoy.

Hunahpú e Ixbalanqué. Aquéllos eran invocados por los músicos y los cantores, por las gentes antiguas. Invocábanlos también los pintores y talladores en tiempos pasados. Pero fueron convertidos en animales y se volvieron monos porque se ensoberbecieron y maltrataron a sus hermanos.

Popol Vuh.


Paralelamente a sus contemporáneos los Aztecas eran un pequeño grupo de extranjeros provenientes de la zona del gran lago salado, próximo al desierto Utah. Después de una lenta marcha a través del nuevo México se produjo una nueva emigración hacia el sur este, hacia el altiplano de México. A través de una organización social y una economía sumamente rígida, con un ágil sistema de alianzas, lograron en poco tiempo imponerse a todos los demás grupos. La ultima de las grandes culturas mesoamericanas, construyeron su base de poder en Tenochtitlan centro de desarrollo y urbanismo pocos pueblos pueden presumir de haber conseguido tanto en tan poco tiempo como lo que logro el pueblo azteca. De aquí en adelante la confrontación entre los dos pueblos seria la principal causa de su dispersión.

Entonces que tengo que perecer.
Como también las flores que cultive perecerán
De mi nombre nada quedará
Nadie de mi fama recordará
Pero los jardines que planté son jóvenes y crecerán
Como las canciones que canté
Cantándose seguirán”


La lírica azteca suena a una premonición de su futuro como pueblo guerrero, el arte azteca es fundamentalmente un leguaje utilizado por la sociedad mesoamericana para transmitir su visión del mundo, pues es un arte inspirado en la violencia, porque posee una alta complejidad intelectual, y antes que todo una sensibilidad simbólica ante el tiempo.

De mi nombre nada quedará
Nadie de mi fama recordará


La música tiene un significado utilitario de gran importancia en las culturas prehispánicas, algo así como el motor o la vitamina espiritual para que los indígenas representen sus creencias, su religión, su fuerza cósmica, su ímpetu imperial.
El arte, la danza, el teatro y la poesía nos explican su enorme importancia, un ejemplo del fenómeno histórico que aun representan nuestras comunidades. El arte fue y es la agonía de los intrépidos que intentan enaltecer o colear sus tristezas.
La magia de la música busca encontrar sintonía con sus antepasados.